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MÁS QUE PALABRAS

Internet

ENTREVISTA A ARTUR SERRA

POR BUCANEROS
P.3

La sociedad actual tiende a caminar hacia lo que ha pasado a denominarse como sociedad del conocimiento, que en palabras de Artur Serra es por naturaleza “Aquella comunidad humana donde se produce conocimiento”.
La sociedad hasta la fecha ha vivido sumida en la producción de conocimiento para la propia subsistencia, pero lo cierto es que desde hace algún tiempo las cosas están cambiando. Los que defienden esta idea de variación abogan por designar este nuevo estado social como sociedad de la información y coinciden en señalar que nos hallamos justo en el inicio de esta nueva etapa llamada a ocupar el futuro próximo. Según Serra actualmente aún nos encontramos en el umbral de la Sociedad del Conocimiento, o lo que es lo mismo la etapa conocida como Sociedad o Cultura de la Información, que ha nacido gracias al desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación, las TIC, surgidas de la informática y de Internet.

Para los que como Artur Serra, coordinador del Centro de Aplicaciones de Internet (CANET), defienden una progresiva adaptación de los ciudadanos e instituciones gubernamentales a esta nueva realidad que se asemeja irrefutable, lo importante ahora es “desarrollar la infraestructura que sea capaz de absorber estas necesidades” y Internet Internet es tan sólo la infraestructura de la sociedad del conocimiento, pero esa sociedad esta todavía por diseñar y construir. Debemos asumir pues que no se alcanzará la cumbre de la sociedad del conocimiento hasta que no se hayan asumido las bases necesarias que nos lleven a ella. En definitiva Internet es la autopista hacia la sociedad del conocimiento, pero para que nos dote de un resultado efectivo, esta vía grande e inmediata debe estar cimentada por unas TIC desarrolladas, o TSI “Tecnologías de la Sociedad de la Información” como defiende Serra.
Las redes ciudadanas, nacidas en USA y Canadá como "freenets", eran redes con servicios comunitarios basados en redes informáticas puestos en marcha por la propia sociedad civil local. Podemos obtener artículos y materiales de este primer proyecto en: CANET

No obstante, mucho ha llovido desde que en el barrio Neoyorquino de Harlem una profesora de instituto (Tonia Stone) fuera precursora en lo que en la actualidad conocemos como redes ciudadanas, con su projecto Community Technology Center Network. Ahora bien, el tema de las redes ciudadanas todavía continúa siendo un campo de experimentación, porque desde aquella primera red de PC las cosas han evolucionado pero las carencias de forma siguen siendo palpables. Las redes ciudadanas que actúan en la actualidad se ven privadas de las necesidades que les permitirían ampliar su función socializadora y hacer llegar esa información generada en base a unos recursos informáticos a un abanico más amplio de la población. La infraestructura falla, es una cuestión de forma.
Las redes ciudadanas no deben entenderse como un mero servicio de acceso a la red ofrecido por una entidad publica universidad o ayuntamiento o entidad sin animo de lucro, es decir como una simple web de información local, sino que debe considerarse como una asociacion com objetivos propios y distintos al resto de asociaciones de la sociedad civil local donde se expandan y comportan conocimientos. Las redes ciudadanas deben ser como un laboratorio de la sociedad de la información en pequeño, puesto que detrás de cada ordenador hay una persona, gente que se agrupa en el seno de su comunidad aportando conjuntos informáticos e información.

Asimismo, se habla a menudo de una Barcelona digital y se olvida al hacerlo que la ciudad Condal esta faltada de un urbanismo digital que permita llevar a buen puerto un proyecto de esta envergadura. Para Artur Serra, buena parte de esta responsabilidad radica en los organismos gubernamentales y en concreto en las actuaciones que al respecto esta llevando a cabo el ayuntamiento que “no permite que aquellos que poseemos conocimientos sobre la materia los pongamos a su disposición” y afirma que” las personas que queremos hacer una gran Barcelona digital reclamamos un espacio, negado en repetidas ocasiones, desde el cual poder llevar a cabo nuestras ideas”.
El error radica en que el ayuntamiento de Barcelona como organismo público ha querido aglutinar el concepto de ciudad digital en su página Web oficial. En opinión de Artur Serra la necesidad primera es huir de este monopolio y abrirse a nuevas propuestas ya que “ la ciudad necesita una página Web donde las infraestructuras y los ciudadanos tengan presencia”. El ayuntamiento, pues, debe hacer crítica constructiva de su gestión y entender que la sociedad de la información no funciona como la del bienestar. Un proyecto de tal envergadura necesita de la colaboración de todo aquel que pueda y tenga algo que aportar. Los ciudadanos pueden ofrecer estos conocimientos y brindar los medios para alcanzar esas metas. Es necesaria una interacción entre ayuntamiento y ciudadano.

La pregunta que desde nuestro grupo se formuló hacía referencia a las posibles ventajas que el proyecto urbanístico 22@ pude suponer para el desarrollo de la Sociedad de la Información en Barcelona y Cataluña. Artur Serra afirmó que se trata de un proyecto positivo para avanzar en las nuevas tecnologías aunque el elevado precio de las oficinas en la zona dificultará el acceso de las pequeñas empresas.